April 01, 2008

Me asustaba regresar. Retroceder. Pero no. De pronto, como un regalo inesperado, él abrió un espacio secreto y me dejó entrar en su mundo interior. Compartió conmigo su intimidad. Desde entonces todo ha sido diferente. Por algún motivo, siento una calidez aquí adentro que nada ni nadie me puede arrancar. Su confianza y mi aprendizaje, me iluminaron desde lo más profundo, desde la esencia. Al final esto es todo lo que importa. Estar sentados en torno a una mesa, pronunciar esas palabras, emocionarnos, abrazarnos bajo el sol de otoño.

1 comment:

Bitter & Sweet said...

Disfruta respirando lento.
Para que todos estos momentos, queden para siempre.
Todo lo mejor para ti.